La robótica y la inteligencia artificial han ido de la mano de forma recurrente a lo largo de la ciencia ficción. Además de formar parte de la historia, sirven como indicadores del avance tecnológico que se ha producido en ese lugar y ese tiempo al que el autor quiere llevar al público.
Uno de los universos más extensos y populares de ciencia ficción es Star Trek, la creación de Gene Roddenberry para la televisión de los años sesenta que conquistó las pantallas de cine tras convertir un la idea de un episodio piloto para el relanzamiento de la serie en una película tras el apabullante éxito de Star Wars en 1977. En esta utopía que tiene lugar en el siglo XXIII la humanidad ha alcanzado grandes logros: cada humano tiene sus necesidades básicas cubiertas, se han logrado impresionantes hitos tecnológicos como, por ejemplo, los viajes a velocidad mayor que la de la luz, y se ha conseguido la igualdad de género (lo máximo que permitieron los productores televisivos de la época).
Pero, ¿cómo queda el ámbito de la robótica y la inteligencia artificial en la serie original de Star Trek? En lo relativo a la singularidad tecnológica, momento en que las inteligencias artificiales y robots se equiparen o superen al ser humano, en la serie original sí se ha alcanzado, pero al final ese cambio no se ha incorporado a las vidas de los contemporáneos del siglo XXIII.
La singularidad tecnológica se puede presentar de varias maneras, y dos ejemplos de ello se muestran en sendos episodios de la serie original. Por un lado, el episodio séptimo de la primera temporada “¿De qué están hechas las niñas pequeñas?” refleja la posibilidad de descargar la conciencia en una máquina, en este caso, un androide que sería una réplica exacta realizada con una ingeniosa tecnología que, sobre todo, se presta al deleite visual del espectador. Esto ocurre en uno de los planetas a los que llega la tripulación de la Enterprise, en este caso para encontrarse con el presuntamente desaparecido doctor Korby.
En el otro ejemplo, sin embargo, el episodio “El mejor ordenador” (episodio veinticuatro de la segunda temporada), es la propia Federación quien tiene la iniciativa de crear un ordenador lo suficientemente potente e inteligente para que asuma las funciones de toda la tripulación de una nave estelar. Cómo no, la Enterprise es la nave elegida para probar esta inquietante maravilla tecnológica que recibe el nombre de M5.
En ambos casos se aborta la evolución de estas inteligencias artificiales, de manera que se mantiene este futuro utópico que, entre otras cosas, se caracteriza por la imprescindible labor humana para llevar a cabo las tareas y decisiones más importantes. En la sociedad actual, la introducción de máquinas y ordenadores cada vez más potentes está dejando sin empleo a muchas personas. Y esto no ocurre sólo en cuanto a trabajos menos especializados. Las inteligencias artificiales amenazan también la necesidad de un gran número de profesores universitarios, periodistas o científicos humanos, tal como analiza Martin Ford en su libro El auge de los robots, que tiene el inquietante subtítulo de La tecnología y la amenaza de un futuro sin empleo.
Es el actual un momento histórico clave. Hacia dónde se dirijan los pasos del desarrollo tecnológico, influenciado, por otra parte, por factores sociales, económicos y políticos, será vital para marcar el futuro de la especie humana y de todo el planeta. Star Trek es un rico espejo en el que mirarnos e inspirarnos para avanzar en la dirección de un mundo más justo y amable para todos. En las series del universo Star Trek que se realizaron posteriormente, al contrario que la serie original, sí que se pueden ver de forma habitual robots inteligentes en igualdad de condiciones en roles antes destinados sólo a humanos, como el arquetípico androide Data de la serie Star Trek: la nueva generación (1987-1994). Incluso con la incorporación de la singularidad tecnológica, ellos lo han conseguido.
Nota: por simplificación narrativa, con el término “humano” también quedan incluidos los vulcanos y todas las formas de vida extraterrestres pertenecientes o afines a la Federación de Planetas.
Atribución de la imagen: http://1darthvader.deviantart.com/art/Star-Trek-The-Original-Series-386909005
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